1. El Recorrido…… Ya sea andando o rodando, diríjase (después de pasar por un nido de aves) a la avenida Molinos y dispuesto a dar una gran vuelta, no se siga derecho por Francisco Zubarán sino que se tomará el Blvd. Adolfo López Mateos, después Avenida Centenario, acto seguido súbase por Alta Tensión (por donde podrá ver una favela perdida en el asfalto, pero eso sí, con su Dish network, como no), dese la vuelta en Rosa Vulcano, camínele unas cuantas cuadras más (ya merito, ya merito) y en Rosa Estrella de la vuelta a su izquierda en la mera esquina con Avenida del Rosal, encontrara la Copa que andaba buscando….Nótese que habrá pasado de la Delegación Beni Juárez a la Álvaro Obregón y que justo a eso de las 13 hrs, el sol en su máximo esplendor hará sudar los cuerpos, las entrepiernas y todo aquello que no sea tocado por sus rayos…Pufff…..
2. La recarga de combustible….. Habiéndose llegado a la Copa de Oro y sobrevivido a las inclemencias del Dios Sol, se dispondrá el espíritu para beber el líquido vital, pero oh, sorpresas de la vida, no habrá llegado y entonces, tendrás que pasar en frente al famoso Narajin, para degustar en compañía de la bandera de unos taquines al pastor o ya si estás encarrerado, uno de bistec que tú compañera de la derecha gustosa te cederá…
3. Reconocimiento del Lugar….. La Copa de Oro huele a historia, tiene la licencia 23485 y data, como me dijo Don Chelo, de 1945… Las poco más de seis décadas han dejado su huella: pintura degastada, floreros vacíos, paredes con polvo, humedad por todas partes y personajes con mirada nostálgica y semblante distante, como recordando una época que no volverá; pero eso sí, una rockola con puras de antaño, un altar a la virgencita (para aquellos devotos), una radio de esas que ya no se hacen, un par de cuernos de toro, unas mesas para las tertulias pulqueras, un jicarero gustoso, y un pulque que sabe a gloria…….
4. La Degustación…. Con sólo $10 (así como lee, diez morlacos lo acercan al cielo) ud. puede degustar de un litro de pulque natural, o si ya anda muy gastado, pues un vaso no tan pequeño se lo deja Don Chelo en $5, es un pulque suave, se puede beber de un tirón, casi no es agrio y es de consistencia ligera… Pida lo que más le convenga y postre sus sentaderas en una de las cinco mesas que tiene el lugar, brinde con la banda e intente viajar a la época en que ese lugar estaba lleno de trabajadores que pasaban por ahí antes y después de las jornadas largas… En la Copa, se habla de todo, de profesiones, de gustos, de pasiones, se acerca más a la gente, la camaradería es inmensa y las amistades se profundizan… No hay lugar como una pulcata para poder charlar a gusto, no hay restricciones, no hay límites, cada persona entra, bebe, habla y viaja a su gusto…
5. Partida, triste partida……. Pero claro, hay un momento en que debemos partir y más cuando tienes en tú recorrido un par de pulcatas más, así que estrechamos la mano de Don Chelo y dejamos atrás una Copa que tristemente ahora parece de bronce, donde el pulque llega tarde, donde la gente ya no va como antes, donde el negocio y el gusto están muriendo y donde el pequeño Oasis pulquero en los límites de la Benito Juárez y la Álvaro Obregón, es el único sobreviviente en la zona, de ocho que solía haber hasta que las grandes cerveceras llegaron con sus anuncios y sus falacias, pero esa, es otra historia………
Reseña por: D.F.rrante
4 comentarios:
Ea de eso se trata jóvenes de participar, felicidades por la reseña. El pulque de la copa viene de tlaxcala esta muy bueno y barato.
Yo fui hace muchos años
aun atiende el ruquito?
hey yo conosco una pulkata ta ahi por el metro cd azteca se llama "La Puerta Negra"
deberian de darse un roll o la Titina cerca de la villa
no tiene un coreo
EN LA PUERTA NEGRA SABE RE FEO EL PULMON Y LA TITINA ESTA POR POTRERO SOBRE ROBLES
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